La empresa china de telecomunicaciones Huawei ya confirmó que se encuentra desarrollando su propio sistema operativo desde hace algún tiempo, previniendo un escenario en el que, como sucede ahora, no pudieran utilizar la plataforma de Android por un desacuerdo con el gobierno estadounidense.
La empresa china de telecomunicaciones Huawei ya confirmó que se encuentra desarrollando su propio sistema operativo desde hace algún tiempo, previniendo un escenario en el que, como sucede ahora, no pudieran utilizar la plataforma de Android por un desacuerdo con el gobierno estadounidense.
Aunque poco se sabe sobre el futuro sustituto de Android, un nuevo registro solicitado por la fabricante china de tecnología nos adelantaría el nombre con el que será bautizado el sistema operativo, que hasta hace algunos días se habría revelado como ‘Hongmeng OS’.
La Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO, por sus siglas en inglés) habría recibido el pasado 24 de mayo las solicitudes sobre tres nuevas marcas registradas: HUAWEI ARK OS, HUAWEI ARK y ARK OS.
El bloqueo comercial contra Huawei continúa
Aunque el registro de estas marcas no confirma el próximo lanzamiento del sistema operativo chino, si sugiere que la compañía se encuentra trabajando arduamente en el proyecto, ante el desolador panorama que plantea el bloqueo comercial impuesto por los Estados Unidos y el Departamento de Comercio.
Las relaciones comerciales entre Huawei y Google fueron suspendidas después de que la administración de Donald Trump decretara una prohibición en contra de la firma china, evitando que las empresas estadounidense les compren equipos de telecomunicación o vendan componentes para sus productos.
Aunque la existencia de ARK OS resolvería la ausencia de Android en el próximo lanzamiento de un teléfono insignia de Huawei, la empresa aún debe resolver otros problemas de hardware y certificaciones que se han generado tras el anuncio de Google.
Por ejemplo, las organizaciones SD Association y Wi-Fi Alliance han restringido la participación de Huawei como un miembro activo para el desarrollo de sus respectivos estándares de almacenamiento y conectividad inalámbrica, mientras piezas claves como el diseñador de chips ARM se encuentran analizando los efectos de la prohibición en sus componentes