El gobierno del estado brasileño de Amazonas confirmó este lunes el hallazgo de 42 cadáveres de personas detenidas, muertas al parecer por asfixia en diferentes centros penitenciarios, que sumadas a otros 15 descubiertos la víspera en otra cárcel brasileña arroja un total de 57 reos muertos.
Los cuerpos de los reclusos fueron hallados en el Centro de Detención Provisional Masculina (CDPM 1), en el Complejo Penitenciario Anísio Jobim (Compaj) y en la Unidad Prisionera del Puraquequara, en el Centro Penitenciario (CIP) (UPP), todos ubicados en Manaus, capital de Amazonas.
Las muertes se registraron un día después de que los 15 detenidos del Compaj fueron asesinados.
En total, el número de muertos en el sistema penitenciario brasileño llega a 57, citó la Agencia noticiosa Brasil.
El Ministerio de Justicia y Seguridad Pública dijo que enviará una Fuerza de Tarea de Intervención Penitenciaria para actuar en el complejo penitenciario.
Según el comunicado de la cartera, el Departamento Penitenciario Nacional (Depen) aguarda la formalización del pedido, pero ya está tomando las medidas para el desplazamiento del equipo.
El gobierno de Amazonas informó que ya oficializó la solicitud de actuación de un equipo de intervención penitenciaria para el estado.
En una nota divulgada desde el domingo, la Secretaría de Administración Penitenciaria dijo que las muertes ocurrieron durante una “pelea entre presos” de los pabellones 3 y 5, y que, tras el accionar del Batallón de Choque de la Policía Militar, la situación en el Compaj estaba bajo control.
Ninguna fuga fue registrada y ningún agente penitenciario fue herido durante el tumulto del domingo, que habría comenzado durante el horario de visita, añadió la dependencia.
Según el gobierno del estado, la Seap inició investigaciones para identificar a los responsables de los hechos, tanto del domingo como de este lunes, y cuyos resultados serán remitidos a la justicia.
El Ministerio de Justicia informó que algunos presos serán trasladados a cárceles federales.