El Representante Comercial de la Casa Blanca, Robert Lighthizer, la Cámara de Comercio de Estados Unidos y el liderazgo republicano en el Senado, mostraron en diversos tonos su desacuerdo con la aplicación de crecientes tarifas arancelarias punitivas contra México.
Lighthizer se habría opuesto a la aplicación de esos aranceles, según comentarios de allegados a The Wall Street Journal, mientras el líder de la mayoría republicana en el Senado, Mitch McConnell, adelantó que habrá un detallado examen de la medida que aplica en forma inicial tarifas de 5.0 por ciento a los productos mexicanos vendidos en Estados Unidos. Según el líder legislativo, las medidas que anunció la noche del jueves el presidente Trump serán motivo de discusión con sus compañeros senadores y la administración federal.
En tanto, la Cámara de Comercio analiza sus opciones legales ante la aplicación de las tarifas a partir del próximo 10 de junio que buscan obligar a México a detener el flujo de migrantes sin documentos. John Murphy, vicepresidente de Asuntos Internacionales de agrupación, dijo este viernes a la prensa que no existe otra elección sino analizar cada alternativa para eliminar la medida anunciada la noche de este jueves por el presidente estadounidense Donald Trump.
La Cámara de Comercio no es el único grupo que analiza ir contra la medida anunciada la noche del jueves, señalaron fuentes empresariales al sitio CNBC. Estas organizaciones han cuestionado de manera repetida la aplicación de tarifas a socios comerciales estadounidenses como México, Canadá o China, y una demanda escalaría su oposición a la política de la Casa Blanca.
El presidente del comité de Finanzas del Senado, Chuck Grassley, cuestionó la medida y advirtió que estaría en riesgo la ratificación del T-MEC, el acuerdo tripartito con México y Canadá, negociado para sustituir al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), vigente desde 1994.
Entre los estados potencialmente más afectados por las tarifas a las importaciones mexicanas se encuentra Arizona, cuyas compras al exterior corresponden en 40 por ciento a productos mexicanos.
En el comercio de Michigan ese porcentaje se ubica en el 38 por ciento y en 35 por ciento el de Texas, y habría consecuencias electorales de cara a los comicios de 2020 en que Trump buscaría su reelección.
CNBC hizo notar que Arizona, Michigan y Texas se inclinaron por Trump en los comicios de 2016, pero las tarifas podrían repercutir electoralmente.
Texas es un estado republicano fiel, aunque varios legisladores de ese partido se avizora que tendrían problemas para reelegirse en los comicios de 2020, mientras que la tendencia en Aizona es hacia los demócratas y Michigan votó demócrata en 2008 y 2012 pero republicano en 2016.
El senador republicano más importante en el Congreso, el líder de la mayoría, Mitch McConnell, enfatizó que una saludable y vibrante relación económica con México “es una fuente vital de nuestra prosperidad conjunta”. Cualquier propuesta que impacte esa relación, merece un examen serio y yo preveo que habrá de discutir ese planteamiento en detalle con mis demás compañeros senadores y la Administración, apuntó en un comunicado.
Por lo pronto, la senadora Martha McSally que buscará su reelección el año próximo, señaló de manera enfática que no apoya ese tipo de medidas que hieren la economía de los pequeños negocios y familias de Arizona, estado al cual representa.
El senador demócrata por Michigan, Gary Peters, quien también busca su reelección, se mostró preocupado por la medida y su impacto en los trabajadores de la industria automotriz de esa entidad estadunidense. No es claro cómo va a mejorar la seguridad en la frontera con México, sostuvo el legislador.