Por Félix Cortés Camarillo
Rémora. Del latín remöra
Yo no quiero imitar a mi queridísimo Armando Fuentes Aguirre quien con falsa modestia manda mensajes a sus cuatro lectores. Yo sí soy banal y pretensioso, y para solaz y esparcimiento de mis innumerables seguidores compartiré los nombres con los que se identifica a la rémora. Agárrense: pegador, tardanos, pega, guiacán, estorbo, impedimento, lastre, dificultad, traba, obstáculo o freno.
Para los menos ilustrados, que somos los más, tendré que recordarles que la rémora es un pez fusiforme de color ceniciento, teleósteo de la familia de los equenidos y la suborden de los acontopterigios. Después de esa mamona introducción, que está científicamente documentada, voy al tema.
Las rémoras son unos pinches peces huevones que anda a la caza de peces mayores, para pegárseles con una membrana de succión al espinazo y vivir de los despojos de sus presas, especialmente cuando el de abajo es tiburón. Para que me entiendan, en inglés le llaman Sucker Fish.
Los humanos, especialmente los políticos, que tienen muy escaso intelecto creativo, suelen adoptar de la zoología calificaciones para sí mismos. Así le llaman burro a un colega, zorro a un jefe, hormiga al obrero, oso al baboso grandote y mojarra enjabonada al que no pueden atrapar en sus maromas. A las rémoras les llaman asesores, diseñadores de campaña, encargados de actos masivos y otras mamadas.
De pronto, el ex presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, don Arturito, convertido en propagandista de la candidata del gobierno, y –ojo– línea de contacto con los jueces, se ve envuelto en una denuncia sobre graves actos de corrupción de suyo y los suyos. Y él se defiende como gato boca arriba. Y amenaza con juicio político a la presidente de la SCJN, la temida señora Piña. Cosa que él sabe es improbable.
Lo indudable es que el ministro en retiro se ha convertido en una rémora para Claudia Scheinbaum que ya se siente Presidenta; en una rémora nutrida, en un lastre pesado un Suckerfish que le puede chupar más que la sangre. Si no se deshace de él, no se va a poder deshacer del otro.
Tal vez yo no tenga razón. Pero como decía mi abuela, piensa mal y acertarás.
PARA LA MAÑANERA (Porque no me dejan entrar sin tapabocas): Creo que Nahuel es un excelente portero de los Tigres. De los mejores que he visto, desde Yashin, la araña negra. Pero meterse en el clásico al palco del dueño CEMEX para mandarle rayos láser al portero del Monterrey, son chingaderas. Y no debe quedar así.