El Presidente de la República aseguró que la detención del empresario Carlos Ahumada no es venganza política por los videoescándalos que causaron su desafuero cuando era jefe de gobierno en 2005.
El presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó en conferencia de prensa que no se utilizarán las instituciones para afectar a nadie y a quienes fueron o son sus adversarios los tratará con respeto, ni siquiera a Carlos Salinas de Gortari.
“No hay consigna para perseguir a nadie… Todos lo que nos hicieron daño deben de ser tratados con respeto y sobre todo no deben utilizarse las instituciones para afectar a nadie, debe de haber parcialidad, no represalias”.
López Obrador recordó que fue el mismo Ahumada quien confesó en un video para el canal 6 de julio que se reunió con Salinas y Diego Fernández de Cevallos para perjudicarlo cuando era jefe de gobierno.
Mencionó que ni siquiera actuará contra Salinas, a pesar de que fue quien promovió una campaña para que no ganara la presidencia y a quien llama el “padre de la desigualdad”.
Dijo que la Fiscalía General de la República será la encargada de investigar todas las denuncias que estén rezagadas y que no actuará como en los gobiernos anteriores donde se perseguía a opositores.
El pasado 16 de agosto Ahumada fue detenido en Argentina por daños contra la hacienda pública luego de que la Fiscalía retomó una denuncia de 2016. Sin embargo, ayer fue puesto en libertad porque su abogado presentó un documento sobre el ejercicio fiscal de 2012.
Los videoescándalos
En 2004, cuando AMLO era jefe de gobierno, se difundieron videos en los que se veía a Ahumada dar fajos de billetes a René Bejarano, exsecretario particular de López Obrador, los cuales serían destinados a las campañas del PRD.
Por los hechos, Bejarano estuvo ocho meses en prisión; Ahumada huyó a Cuba, donde fue detenido, extraditado a México y privado de su libertad de 2004 a 2007.