Por Obed Campos.
Si usted vive en Nuevo León y está apostando a que nos vamos a quedar sin gobernador, yo le recomiendo que no apueste su fortuna a ese respecto.
Pese a todos los pesares, Jaime Rodríguez Calderón, El Bronco, y su second, Manuel González Flores, pueden salir airosos de la tormenta que se les viene encima, de acuerdo con expertos y analistas políticos.
Los duchos en el tema legal/electoral ven como muy insegura la decisión de dictarles una sanción directa a los dos funcionarios por el desvío de recursos para la fallida campaña presidencial de Rodríguez Calderón, esto en vez de someterlos a juicio político.
“Y es que NO HAY ninguna ley que contemple que un Congreso local pueda sancionar, o hasta destituir, a su propio gobernador, A EXCEPCIÓN de la legislación aplicable al Juicio Político…” publica hoy la Protágoras, columna política del periódico El Horizonte.
La preocupación principal de la columna es si con esta decisión, salida a razón de las presiones del senador Samuel García, no ayuden más a Jaime de lo que lo perjudiquen.
Y es que como dicen en el rancho, y Jaime lo ha demostrado, el gobernador de Nuevo León salió más resbaloso para agarrarlo, que un pez enjabonado.