El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, cumplió este fin de semana su promesa de asistir al encuentro entre los Astros de Houston y los Nationals de Washington, de la Serie Mundial 2019 de béisbol.
Cuando su imagen fue transmitida en la pantalla gigante, los aficionados recibieron a Trump con silbidos y abucheos, e incluso le gritaron: “Lock him up!” (“¡Enciérrenlo!”), en una aparente referencia a los procedimientos de juicio político en curso contra el presidente.
El mandatario y su comitiva, entre quienes figuraban los senadores republicanos Lindsey Graham y David Perdue, se encontraban en un palco de los niveles bajos de las gradas cuando se inició el quinto juego de la serie mundial, detalló la cadena de televisión Univisión.
Al final de la tercera entrada, las pantallas del parque mostraron un mensaje que rendía honores a los militares estadounidenses. Hubo entonces ovaciones en el estadio, aunque no eran para Trump.
Al iniciar la cuarta entrada, las pantallas del estadio transmitieron la imagen de Trump unos diez segundos. En ese momento parte de los más de 40 mil espectadores manifestaron su repudio al mandatario estadounidense.
Trump permaneció en el estadio durante siete de las nueve entradas y antes de terminar el partido abandonó las instalaciones deportivas con toda su comitiva. Al final su equipo favorito, los Nacionales de Washington, recibió una tremenda paliza de 7 carreras a 1 y quedó a un juego de perder la serie.
