El imperio cosmético que Kylie Jenner inició en 2015 con sus famosos lip-kits, que prometían unos labios tan voluminosos como los suyos sin necesidad de recurrir a las infiltraciones que utiliza ella, la convirtió en la multimillonaria más joven del mundo.
Ahora la joven empresaria vendió el 51 por ciento de su compañía -que también cuenta con una línea de productos para el cuidado de la piel- a la multinacional especializada en belleza y perfumería Coty, que busca atraer a unos consumidores más jóvenes con esta adquisición que costó 600 millones de dólares.
Aunque en la práctica Kylie ya no tenga una participación mayoritaria de su empresa, en el comunicado de prensa que se ha difundido este lunes para dar a conocer la noticia se ha hecho hincapié en que su equipo y ella seguirán teniendo el control creativo y diseñando las estrategias de comunicación.
La propia celebridad reconoció que esta oportunidad le permitirá centrarse en desarrollar nuevos productos y mantenerse en contacto con sus fans a través de las redes sociales mientras su ‘primer bebé’, como ella se refiere a su negocio, sigue creciendo hasta convertirse en una marca global.