El director del Banco Nacional de Obras Públicas (Banobras), Jorge Mendoza, informó que el avión presidencial regresará a México luego de permanecer más de un año en Victorville, California, en Estados Unidos (EU), donde recibió trabajos de mantenimiento por 15 millones de pesos.
En la conferencia mañanera del presidente AMLO en Palacio Nacional, Mendoza indicó que el regreso de la aeronave tiene como objetivo relanzar los esfuerzos para su compra – venta, debido a que hasta el momento ningún comprador ha formalizado una oferta por la aeronave.
Además, con el traslado se busca también ahorrar recursos, debido a que ahora el Boeing 787-8 permanecerá bajo resguardo de la Fuerza Aérea mexicana y será desde el país que se continuarán con las gestiones para lograr su venta.
El gobierno federal buscará deshacerse de la aeronave a partir de tres posibles esquemas de comercialización: un comprador único, venta en copropiedad y la renta por horas de vuelo.
De acuerdo con la exposición de Jorge Mendoza, en junio de 19 la Organización de las Naciones Unidas (ONU), con quien el gobierno mexicano colaboró para consolidar la transparencia de las operaciones, identificó 42 compradores potenciales en julio, de los cuales 12 manifestaron interés pero sólo 11 fueron invitados para presentar una propuesta.
De los invitados, sólo 6 anunciaron posturas formales y la ONU seleccionó 2, mismas que finalmente no prosperaron.
Una vez en México, el avión presidencial se sumará al proceso de enajenación de diversas aeronaves que llevará a cabo Banobras.
La convocatoria para dicho proceso abrió de manera formal este 14 de enero y se prolongará hasta el día 31 del mismo mes, periodo durante el cual los interesados en hacerse de alguna de las 28 aeronaves deberá inscribirse.
En una segunda fase, cada dependencia –considerando a los interesados que hayan cumplido con los requisitos de la convocatoria- abrirá el proceso formal que contempla una segunda visita de inspección y revisión documental. Las posturas deberán presentarse los días 25 y 26 de febrero.
La tercera y última etapa contempla la apertura y fallo de la adjudicación, misma que se llevará a cabo el próximo 27 de febrero, con la selección de la oferta con el precio más alto en relación con el valor mínimo de cada aeronave.
De acuerdo con la Secretaría de la Defensa Nacional, durante la estancia del Boeing 787-8 Dreamliner en Victorville, California, se desembolsaron 13 millones de pesos por conceptos de reguardo y 15 millones de pesos en trabajos de mantenimiento.
