La Comisión Federal de Comunicaciones (FCC, por sus siglas en inglés) obtuvo 1,312 quejas por parte de aficionados que se quejaron del show del medio tiempo en el que estuvieron Jennifer López y Shakira.
La información fue revelada por WFAA, una estación de televisión en Dallas, Texas, que publicó las quejas, provenientes de 49 estados.
«El show no fue apropiado para una audiencia general. Fue explícito sexualmente y hubiera sido considerado pornografía suave hace unos cuantos años», manifestó una queja en Wyoming.
«No me suscribo al Canal de Playboy. Simplemente queríamos sentarnos como familia y ver el Super Bowl. Dios sabe que esperábamos ver un partido de futbol americano y un concierto breve, pero en lugar, abusaron de nuestros ojos», declaró una queja de Spring Hill, Tennessee.
«No esperaba ver tanta suciedad en TV. Que se agachen y enseñen esa pequeña pieza de fábrica entre sus glúteos fue demasiado», indicó un fan de Croswell, Michigan, en su queja al FCC.
Las 1,312 quejas no es muy significantes si se compara a los 500 mil que recibió Janet Jackson después de que esta expuso uno de sus pechos durante el Super Bowl XXXVIII en 2004.
Durante el show del pasado 2 de febrero no hubo nudismo pero varios aficionados lo encontraron «muy sexy» y algunos lo llamaron el «Stripper Bowl».
Alrededor de 102 millones de personas sintonizaron el Super Bowl, partido que ganaron los Chiefs de Kansas City por 31-20 sobre los 49ers de San Francisco.