Tigres ganó, goleó, gustó y dio clases de baile en cada uno de los cuatro goles que le clavó a Querétaro este sábado en el Uni. Los felinos no tuvieron problemas para ganar 4-1 ante unos débiles e inoperantes Gallos Blancos que sirvieron de exhibición para que los jugadores de Tigres le pusieran sabor a su inminente llegada a la Liguilla.
La música la puso Tigres a los siete minutos, Julián Quiñones remató de cabeza dentro del área y Nicolás Navarro no pudo controlar una jugada que parecía de rutina para terminar siendo testigo en primera fila del 1-0 de Tigres.
El equipo entró en ambiente, se acomodó en la cancha y la segunda pieza cayó gracias a Carlos Salcedo, quien con un remate de cabeza aumentó los decibeles en San Nicolás. Tigres ya lo ganaba a los 12 minutos y la cancha del Uni era una pista de baile.
Luis y Julián cambiaron el ritmo, pusieron un corrido, Luis escribió la jugada por el costado derecho y Julián entonó al entrar sin marca para clavar el 3-0 de cabeza al 53′.
Ake Loba puso un alto a Tigres, anotó y los felinos bajaron el volumen de su fiesta al 63, pero la fiesta seguía, a Tigres nadie lo para.
Ya con Aquino en la cancha el baile seguía y así el mundialista envió un pase a Eduardo Vargas, quien recibió, vio y perforó para el 4-1 al 73, un gol con dedicatoria que sirvió como serenata en uno de los palcos para André-Pierre Gignac.
El único abucheo de la noche se lo llevó el silbante Fernando Hernández quien al 78 marcó penal tras una falta que recibió Javier Aquino, pero un minuto después y tras analizar la jugada en el VAR determinó anular, y marcar saque de meta.
Con ONCE partidos, Tigres suma 26 puntos, acaricia la Liguilla y le pone música al Clausura 2019 ¿habrá más bailes?
Fotografía: Mexsport