Kelly Whalen, residente de Illinois, Estados Unidos, está demandando a Instagram y Facebook por la cantidad de 500 mil millones de dólares (11 billones de pesos); ella señala que la aplicación a estado robando datos biométricos de al menos 100 millones de usuarios.
Whalen afirma que la app usa el reconocimiento facial sin pedir permiso al usuario, con lo que recaba datos de todas las personas que la usan; esto con el fin de almacenarlos y lucrar con los mismos, ya sea como parte de su modelo de negocios o al venderlos a otras compañías.
Asimismo señala que la mencionada recolección sucede desde hace ya varios años; pero fue hasta este 2020 que la compañía mencionó algo al respecto. Pide que se le haga una indemnización a cada usuario afectado por un monto de entre mil a 5 mil dólares (22 mil a 110 mil pesos), en total se acabarían pagando los mencionados 500 mmdd.
Facebook niega las acusaciones
Stephanie Otway, vocera de Facebook, negó tales acusaciones asegurando que aunque se barajó este año introducir el reconocimiento facial en Instagram; hasta este momento, la aplicación no usa dicha tecnología.
En otras palabras, no hay posibilidad de que se hiciera una recolección de datos biométricos; por lo menos no de la manera en la que menciona Kelly Whale. Dando como resultado una demanda infundada, de acuerdo con la propia Otway.
No sólo eso, en caso de que en algún momento se pensará en aplicar la tecnología de reconocimiento, previo a esto se haría un anuncio general a medios y usuarios, para que todos estos estuvieran informados de la situación.
Actualmente la demanda ya se encuentra en la Corte Superior de California, por lo que será deber de las autoridades desestimarla o hacer que proceda.