La tienda de autoservicio HEB fue criticada en Twitter por confundir a los clientes sobre el nuevo etiquetado de alimentos y bebidas para alertar sobre comida chatarra.
En sus pasillos, la tienda colocó unos carteles sobre el etiquetado(temporal y adherible que deberá colocarse hasta el 31 de marzo del 2021), en los que se cuestionaba si la advertencia «Exceso» era buena o mala.
En Twitter un usuario lamentó la posición del comercio, que es parte de la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD).»HEB parece no comprender que el etiquetado para la salud califica las características del producto y no su porción como incorrectamente afirman»Usuario de Twitter
Lamentable ver este tipo de información por @HEB. Parece NO comprender que el #EtiquetadoParaLaSalud califica las características del producto y NO su porción como incorrectamente afirman.
— Dr. Simón Barquera (@SBarquera) October 24, 2020
Prefiere alimentos o productos SIN sellos. Evita todo lo posible consumir #comidachatarra pic.twitter.com/VWNeN2E2K0
El nuevo etiquetado en alimentos tiene como función alertar a la población de los niveles calóricos que contienen dichos empaques alimenticios.
- Reflejará los excesos que contiene la mercancía, donde sus principales características son:
- Advertencia sobre el contenido o excesos en grasas saturadas, azúcares, calorías, sodio, entre otros.
- Las etiquetas serán de color negro y de forma octagonal.
- Algunas empresas de bebidas no alcohólicas tendrán que colocar la frase “evitar en niños”.
No gusta a ANTAD el plan de nuevo etiquetado
A la ANTAD no le gustó el plan de nuevo etiquetado y a mediados de septiembre dijo que habrá un escenario de un pasillo lleno de productos con etiquetas en blanco, donde más que las marcas lo que destacarían serían las leyendas y/o semáforos de advertencia.
La organización aglutina a 104 cadenas, de las cuales 32 son de autoservicio, entre las que están Soriana, Chedraui, Costco, HEB, S-Mart, Merco, Ley y Waldo’s.
Para Vicente Yáñez, presidente de ANTAD, aunque el etiquetado actual se puede mejorar, no es con «pegotes» de advertencia que se logrará combatir la obesidad, como busca la iniciativa.