El Departamento de Defensa de Estados Unidos redujo tropaspresentes en Afganistán e Irak a 2 mil 500 efectivos para cada país, en un intento de Donald Trump por cumplir una promesa de campaña antes de dejar la presidencia y dar por terminados los conflictos bélicos iniciados a principios de siglo.
El secretario de Defensa interino, Chris Miller, aseguró este 15 de enero que la pacificación de Afganistán e Irak avanza según lo estimado por el gobierno de Donald Trump, y por ello es posible disminuir sus tropas desplegadas para velar por la seguridad de ciudadanos estadounidenses y locales.“Hoy, Estados Unidos está más cerca que nunca de poner fin a casi dos décadas de guerra y dar la bienvenida a un proceso de paz gestionado y liderado por los afganos para lograr un acuerdo político y un alto el fuego permanente y completo”.Chris Miller
Donald Trump prometió en campaña sacar a las tropas de Afganistán e Irak
Estados Unidos declaró la guerra a Afganistán en octubre de 2001, acusando a su régimen fundamentalista de proteger a los autores del atentado terrorista en el World Trade Center de Nueva York ocurrido semanas atrás.
En 2003, el entonces presidente George W. Bush atacó Irak sin autorización de la ONU, también bajo pretexto del combate al terrorismo y con el objetivo de destruir armas de destrucción masiva en poder de Saddam Hussein, mismas que nunca aparecieron.
Donald Trump criticó en su momento ambos conflictos bélicos y prometió durante su campaña acabar regresar a Estados Unidos las tropas estacionadas en Afganistán e Irak, asegurando que el gasto de la ocupación era demasiado elevado.
De acuerdo con la agencia de noticias AFP, Chris Miller agregó que una retirada total de Afganistán dependerá de las pláticas que sostienen el gobierno con los rebeldes del talibán, pero se mostró confiado en que los 2 mil 500 soldados protejan “a Estados Unidos, nuestra gente y nuestros intereses”.
En cuanto a Irak, afirmó que la menor presencia militar es un voto de confianza a las fuerzas de seguridad locales, pero agregó que no ha habido un cambio de política respecto al país y “las fuerzas estadounidenses y de la Coalición permanecen en Irak para asegurar la derrota duradera” del Estado Islámico”.