Genaro García Luna habría beneficiado a empresarios proveyéndolos de forma irregular de reportes de seguridad e información privilegiada proveniente de la Secretaría de Seguridad Pública durante la administración de Felipe Calderón, de acuerdo con una investigación de la cadena norteamericana Univisión.
Esta información fue entregada por García Luna a los empresarios Mauricio y Samuel Weinberg, de la empresa Icit, sin que existiera un contrato con la Secretaría y por un posible conflicto de interés.
Durante el sexenio de Calderón, José Antonio Polo, coordinador de asesores de García Luna, se desempeñó como jefe en Icit. En entrevista con la cadena de televisión, él reconoció esta situación, aunque por “cuestión de confidencialidad”, se negó a dar más detalles. Aunado a esto, negó haber trabajado para Icit mientras se desempeñó como servidor público.
Los dueños de Icit aceptaron haber contratado a exfuncionarios para su empresa, en entrevista con la cadena norteamericana, aunque señaló que la contratación no ocurrió mientras ejercían un cargo público. Después, la empresa corrigió y señaló que quizás eso pasó “en fines de semana o en horas libres”.
De acuerdo con registros de propiedad de Florida, Genaro García Luna habitó a partir de 2013, cuando acabó su trabajo gubernamental, dos residencias de lujo en dicha entidad. Una mansión ubicada en Golden Beach y un penthouse de lujo ubicado en Aventura, Florida.
Icit, la empresa de los Weinberg, también fue beneficiada con un contrato de adquisición de un programa para rastrear información e interceptar comunicaciones, NiceTrack, de origen israelí.
Foto propiedad de: Tercero Díaz / Cuartoscuro
