La Confraternidad Nacional de Iglesias Cristianas Evangélicas (Confraternice) tocaron la puerta de Palacio Nacional para reunirse con el presidente Andrés Manuel López Obrador: le pidieron tener ser permisionarios y concesionarios de tiempos en la televisión y la radio.
El presidente de Confraternice, Arturo Farela, dijo al salir de la reunión que ésta fue un seguimiento del encuentro que tuvieron en febrero pasado y para pedirle a López Obrador “se divulguen los principios y valores que la biblia enseña”.
“De hacerse esta reforma a la Ley de Asociaciones Religiosas, sería en beneficio de todas las confesiones religiosas en el país”
Farela también se dijo dispuesto a ayudar al gobierno “en todos los trabajos sociales, particularmente en la campaña contra la adicción a las drogas que el presidente de la república ha estado haciendo énfasis de orientar a los jóvenes, darles una opción distinta”.
Oposición a la despenalización del aborto
A propósito de las movilizaciones a favor de la despenalización del aborto y la regresión en materia de derechos humanos en el Congreso de Nuevo León, Arturo Farela se pronunció en contra del aborto y de la muerte digna.
Excusado bajo una interpretación de la biblia, el presidente de Confraternice dijo que “la biblia enseña que la vida es a partir de la concepción de un bebé en el vientre y respetamos a ese bebé hasta que muera”.
Esta visión es ampliamente debatida entre quienes profesan la fe católica, pues consideran que no está en conflicto la interrupción del embarazo porque se fundamenta en una decisión sincera tomada por una mujer que considera es lo mejor para ella.
Apenas el pasado 7 de marzo, el Senado de la República decidió entregar la medalla “Elvia Carrillo Puerto” a María Consuelo Mejía Piñeros, presidenta de Católicas por el Derecho a Decidir.
