La Cámara de Diputados aprobó en lo general la Ley Federal de Austeridad Republicana de Estado, presentada por el Movimiento de Regeneración Nacional desde septiembre pasado y que busca evitar gastos superfluos en la administración federal, así como acabar con prestaciones onerosas a funcionarios.
Con 387 votos a favor y 33 abstenciones, el pleno de la cámara baja aprobó el dictamen, que también reforma y adiciona artículos de las leyes General de Responsabilidades Administrativas; y Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria.
Entre las medidas contempladas en lo aprobado, se eliminarán los escoltas y vehículos blindados a servidores públicos con excepción de aquéllos que lo requieran por la naturaleza de sus funciones, es decir, para altos funcionarios de agencias de seguridad e instancias de impartición de justicia.
Oposición critica Ley de Austeridad
Legisladores de partidos de oposición criticaron la ley al considerar que sólo establece medidas meramente simbólicas que no representan ahorros de consideración, y fue presentada sólo con el propósito de propaganda a favor de la figura presidencial.
Fernando Galindo, del Partido Revolucionario Institucional, recalcó que lo único bueno de la ley “es su nombre” pero no aporta nada nuevo y sólo recopila disposiciones que se pueden encontrar en otras leyes o decretos emitidos durante el gobierno de Enrique Peña Nieto.
Además, criticó que se establezca la licitación pública como regla para contrataciones, algo que ya se establece en la Ley de Adquisiciones, mientras que, por otro lado, “sólo 26 por ciento en esta administración se ha llevado a cabo (por un método) diferente a la adjudicación directa”.
Por su parte, Patricia Terrazas Baca (Partido Acción Nacional) celebró el espíritu de la ley y destacó que incorpora la figura de nepotismo, con su respectiva sanción, y la prohibición para crear fideicomisos que sólo sirven para desviar y ocultar recursos públicos.
Foto propiedad de: Galo Cañas / Cuartoscuro