Los dirigentes de los sindicatos de Salud y del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, Marco Antonio García Ayala y Luis Miguel Victoria Ranfla, dijeron que la mayor parte de los nosocomios carecen de combustible para calentar el agua, de medicamentos, de personal médico y de enfermeras para la suplencia de fines de semana.
Aseguran que los servicios de las clínicas y hospitales de la Secretaría de Salud y del ISSSTE se encuentran colapsados y no cuentan con el material y equipo mínimo necesario para ofrecer y dar buen servicio a la población, y que el Presidente de la República ha sido engañado por funcionarios de su administración al decir que todo está bien.
Entrevistados por separado y al término de los trabajos del Consejo Nacional Extraordinario de la FSTSE, coincidieron en que pedirán al Presidente que se liberen los recursos económicos aprobados por el Poder Legislativo para que estas instalaciones cuenten con el equipo necesario, así como de los insumos para ofrecer los servicios de salud de calidad que demandan los mexicanos.
El líder del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud, García Ayala, advirtió que el recorte que 735 millones de pesos para el sector salud tiene un impacto negativo para la población, pues se dejará de contratar personal médico y de enfermeras.
Aclaró que los diferentes institutos del sector salud no son autónomos como señala el titular de la Secretaría de Salud, Jorge Alcocer Varela, y agregó que el personal médico y de enfermeras que estaban en el programa Prospera, sobre todo en las zonas rurales, fueron dados de baja.
“Lo que se informa al Presidente no corresponde con la realidad de lo que sucede en el sector salud y la población exige buenos servicios.”
Consideró que el Secretario de Salud no ha defendido a los trabajadores, principalmente a los médicos y enfermeras, quienes están en la mejor disposición de ofrecer sus servicios para mejorar la atención de los enfermos en los hospitales y clínicas en la dependencia.
“No hay recursos para medicamentos ni para insumos, ni tampoco para gasolina, prueba de ello es que las ambulancias están paradas.”
A su vez, la líder del sindicato del ISSSTE, Victoria Ranfla, expuso que el instituto no tiene presupuesto para contratar personal de guardia y se está regresando a los tiempos en donde se utilizaban las cajas de instrumentos y de medicinas para ocuparlas como camas y eso no lo merecen los derechohabientes.
“El diagnóstico es claro, el ISSSTE está colapsado y sus servicios son cada vez de peor calidad.”