Uniformes más ligeros y seguros, que permitan mejor movilidad, estarán portando los elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional a partir del próximo año.
David Flores Hernández, integrante de la Jefatura de Investigación y Desarrollo de la Dirección General de Fábricas de Vestuario y Equipo de la dependencia explicó a Excélsior las características de la vestimenta. Tendrán códigos de identidad y las telas darán la cualidad de ser “invisibles” ante equipos de visión nocturna.
Uniformes estampados a “La Cuba”
De acuerdo con el capitán primero, también acabarán más de 100 años de historia en los uniformes de ceremonias para oficiales del Ejército, quienes ya no usarán el color azul, casi de igual tono del que usa la Fuerza Aérea Mexicana, y usarán el verde olivo, que es el color oficial de este cuerpo.
Flores Hernández detalló que el estampado de las telas para los uniformes militares se realiza bajo un proceso llamado “a la cuba”, que brinda más protección al personal.
“Cada uno de estos colores que utilizamos en nuestro uniforme tiene un reflejo en el espectro de infrarrojo para que, si alguien los observa por medio de aparatos de visión nocturna, hace un reflejo específico y nos permite mimetizar al soldado”.
Accesibilidad en los uniformes
De acuerdo con David Flores Hernández, el uniforme de campaña de los soldados mexicanos tendrá modificaciones en su diseño como el corte de las bolsas frontales superiores. Estas bolsas serán en diagonal y con cierre, y no de corte horizontal, que facilitará “el acceso para guardar y acceder a algunos de los artículos que tengamos en las bolsas”. Además, fueron eliminadas las bolsas inferiores para el uniforme “sea más limpio y ajustado al cuerpo”. En cuanto a los pantalones, éstos contarán con una pretina, que le dará mejor ajuste y comodidad al usuario, según su complexión.
Transición de uniformes, a partir de 2020
Flores Hernández dijo al mencionado rotativo que será a partir de 2020 cuando los jefes y generales del Ejército en la Sedena, dejarán de usar el color azul en sus uniformes de ceremonia, para usar el tono verde olivo.
Explicó que se usaba un azul diferente entre Fuerza Aérea y Ejército, pero, con la intención de buscar una identidad del Ejército acorde a las funciones, la Sedena consideró que el uniforme debe ser verde, “acorde a todos los ejércitos del mundo”.
Según el capitán, el nuevo uniforme de ceremonias para mandos del Ejército tendrá un corte con mejor caída, con entretelas que le darán ergonomía y comodidad, además de que se utilizarán telas más frescas.
También el personal que participa en operaciones tácticas portará nuevo uniforme que lo mantenga fresco.
Se busca que el soldado goce de una mayor comodidad y que no se sienta acalorado cuando está realizando sus actividades. En tanto, la gorra que usarán permite doblarse y recupera su forma, “para tener una mejor presentación, ya que le da cuerpo al artículo”.
Uniformes controlados
Excélsior explica que cada año el personal administrativo de la Sedena recibe dos uniformes, en tanto que el operativo cuenta con tres juegos, todos con códigos personales, por lo que son intransferibles.
Y si un castrense necesita un uniforme extra, hay dos tiendas para su adquisición, toda vez que ninguno de los componentes se puede comprar en la calle.
David Flores Hernández destacó que los uniformes están perfectamente controlados, identificados y registrados.
“Tanto los números de folio, como el proceso de fabricación, es prácticamente imposible comprar un uniforme militar en la calle”.
Foto propiedad de: Juan Carlos/Cuartoscuro
