Por Obed Campos
De plano, en cuestiones de movilidad durante la emergencia sanitaria, en Nuevo León no le han dado al clavo.
Las restricciones impuestas en el Metro y en los autobuses urbanos, lo único que han causado son retrasos y abarrotamiento, lo cual deja muy en claro que el personaje Susana Distancia no viaja en colectivo.
Pero para miles lo peor no es el amontonamiento en estaciones, sino el quedarse hasta cinco horas esperando un transporte que no llega.
Noé Chávez Montemayor, director del Instituto de Movilidad y Accesibilidad de Nuevo León, mostró de qué no está hecho.
Es decir, mostró que, siendo charro, le quedó grande la yegua de la responsabilidad que le encargó su amigo, el gobernador Jaime Rodríguez Calderón.
Mientras tanto, mientras replantea el plan, la ciudad sigue colapsada y, aunque nadie lo ha dicho, las pérdidas son millonarias y se suman a las otras grandes mermas que dejó la crisis en el estado.
JURAMENTO HIPOCRÁTICO
Hay que decirlo: Manuel de la O Cavazos ha sacado la casta en la epidemia de Covid-19, como funcionario en Nuevo León, pero no se le ha olvidado que es médico y que realizó el famoso Juramento Hipocrático.
Esto quedó patente ayer, cuando de la O Cavazos iba camino a su oficina y atestiguó un atropello vial, por lo que detuvo su marcha, bajó de su camioneta y dio atención al lesionado, quien fue auxiliado a los pocos minutos por personal de la Cruz Roja.
¿Habrá compromiso en el médico?