Los directores de los principales festivales de cine de Europa se reunieron para la apertura del evento cinematográfico de Venecia el miércoles, en una muestra de solidaridad con una industria que ha sido duramente afectada por la pandemia de coronavirus.
El director del Festival de Cannes, el más grande del mundo, y sus pares de Berlín, Rotterdam, San Sebastián, Locarno, Karlovy Vary y Londres viajaron a Venecia para la celebración del primer evento internacional de este tipo desde que la crisis sanitaria paralizó el mundo del cine.
«No es por nosotros todo lo que estamos haciendo y estamos tratando de hacer (…) es por el trabajo, es por las películas, es por los directores», dijo el director de Cannes Thierry Fremaux, cuyo propio festival no pudo realizarse este año según lo planeado.
«Durante nuestra conversación en marzo, todos nosotros sentimos la enorme soledad de los artistas, que también se preguntaban qué pasaría. Muchas filmaciones se frenaron, cantidades de lanzamientos fueron cancelados y la misma idea de que el festival pudiera hacerse, mientras los cines estaban cerrados (…) les hizo bien», agregó.
La actriz australiana Cate Blanchett, que preside el jurado de Venecia este año, dijo que también quería mostrar su apoyo a los realizadores que tuvieron que terminar sus películas en circunstancias desafiantes.
«Es genial que haya tantos directores de festivales de todo el mundo que vengan a apoyar a Venecia y se den cuenta de que, de hecho, están (…) apoyando varias facetas diferentes de la misma industria», afirmó.
«Creo que se siente muy colegiado, en realidad, de una manera que tal vez no haya ocurrido antes. Menos territorial», agregó.
Los festivales de cine suelen competir de forma informal para mostrar los estrenos más esperados.
Blanchett y el director de Venecia, Alberto Barbera, destacaron el crecimiento de las plataformas de streaming durante los meses de confinamiento y el efecto negativo que esto puede haber tenido en los cines.
«Hoy corremos el riesgo de avanzar hacia una reducción progresiva del papel de las salas de cine», dijo Barbera.
Con el nuevo aumento de casos de coronavirus en Italia y otros lugares, se ha implementado un estricto protocolo de seguridad, que incluye el uso de mascarillas mientras ven las películas.
Dieciocho títulos compiten por el León de Oro a la mejor película, menos de lo habitual. El máximo premio será entregado cuando termine el festival el 12 de septiembre.