Llamó mucho la atención que su deceso ocurrió justo en el punto más alto de su carrera profesional, poco antes de que se estrenara la cinta en la que dio vida al popular villano de Batman, The Joker, mismo que varios críticos han catalogado como el mejor.
Ahora, gracias al libro Heath, una biografía del actor realizada por la periodista Janet Fife-Yeomans se puede conocer más sobre los tormentosos días que vivió el actor antes de su muerte.
Aparentemente el sesgo actoral que vivió durante algunos años fue un factor de peso en el ánimo del actor.
«La gente no me daba la oportunidad de ser otra cosa más que el ‘galán teñido de rubio’, y me empecé a aburrir, sentía que mi carrera se me estaba yendo de las manos y que otras personas estaban tomando decisiones por mí. Entonces, elegí de algún modo destruir esa carrera para empezar de cero uno nuevo», se puede leer en el libro mencionado.
Para la biografía, la periodista entrevistó a los seres queridos de Heath, quien lo describieron como un amante de la creación y una persona que buscaba innovar su camino en su carrera.
Su gran pasión por los proyectos que lo retaban se retrata en el documental I Am Heath Ledger, dirigido por Adrian Buitehuis y Derik Murray, donde familiares y amigos brindaron su testimonio sin censurarse.
«Desde que empecé mi relación con él que le costaba dormir, su mente no paraba de pensar, y siempre lo encontraba despierto por las noches», declaró en una ocasión Michelle Williams, a quien Ledger conoció en 2004 en el rodaje de «Secreto en la montaña», y de quien se separó en 2007, con quien tuvo una hija.
Los testimonios coinciden en que la intensidad que el actor imprimía en cada uno de sus trabajos.
«A veces su cuerpo le avisaba que tenía que parar, pero él seguía adelante, tomaba tranquilizantes creyendo que con eso iba a poder continuar, y yo siempre le advertía de los peligros»,
Su padre, Kim Ledger, declaró que la muerte de su hijo fue devastadora pero que solo él fue el responsable. Además, negó, como toda la familia, la versión de que el actor se suicidó. «No, jamás lo hubiese hecho», dijo su papá a la prensa, tajante.
«Él fue quien se puso esas pastillas en su sistema y nadie tiene la culpa, pero lo hizo pensando en que lo tenía bajo control, como le explicaba a su hermana, pero, pobrecito, no era así», expresó.