A través de la Oficina de Ortodoxia, y la Congregación para la Doctrina de la Fe, el Papa Francisco firmó un decreto donde asegura que el Vaticano no bendecirá la unión homosexual, toda vez que Dios “no puede bendecir el pecado” que esto representa. Esta respuesta negativa, fue publicada ante los cuestionamientos sobre si la iglesia católica tiene la autoridad de bendecir las uniones entre personas del mismo sexo.
Iglesia católica “no puede bendecir el pecado”
Para argumentar la postura del Vaticano, el clero católico aclaró que, si bien la iglesia ha defendido la libre elección de hombres y mujeres, esto no significa que se aceptan las uniones homosexuales, pues “no son parte del plan de Dios” y no deben confundirse con el sacramento del matrimonio.
“Dios no bendice ni puede bendecir el pecado: bendice al hombre pecador, para que reconozca que es parte de su plan de amor y se deje cambiar por él.”
El Vaticano
Asimismo, el decreto de la iglesia católica recordó a los creyentes que toda actividad sexual que esté fuera del matrimonio, tampoco podrá ser bendecida por Dios, puesto que no estará en un “estado de gracia”.
No obstante, el Vaticano enfatizó en el respeto y dignidad con la que deben ser tratadas las personas homosexuales, pues el “juicio negativo sobre la bendición de las uniones de personas del mismo sexo no implica un juicio sobre las personas».
Polémica por la respuesta del Vaticano a las uniones homosexuales
Francis DeBernardo, director ejecutivo de New Ways Ministry y reconocido por defender la aceptación de los homosexuales en la iglesia, aseguró que la polémica respuesta del Vaticano será ignorada, pues cada vez hay más sacerdotes a favor de las uniones homosexuales y su bendición.
“Las personas homosexuales tienen derecho a estar en
una familia. Son hijos de Dios.
Los católicos reconocen la santidad del amor entre parejas comprometidas del
mismo sexo y reconocen este amor como divinamente inspirado y divinamente
apoyado y, por lo tanto, cumple con el estándar para ser bendecido.”
Francis DeBernardo
Por su parte, James Martin, jesuita y defensor de la comunidad LGBT, dijo que la postura del Vaticano surgía entre las presiones dentro de la iglesia alemana que considera bendecir a parejas del mismo sexo, e impulsar la anticoncepción.
«Parece ser la respuesta del Vaticano a algunos obispos alemanes que habían mencionado esta posibilidad, en el período previo al sínodo de su país, como una forma de llegar a las personas LGBTQ.»
James Martin
Al respecto, Simone Campbell, directora ejecutiva de NETWORK Lobby for Catholic Social Justice, y apoyo a la comunidad LGBTQ en la iglesia, planteó que lo dicho por el Vaticano podía interpretarse como una “respuesta positiva a bendecir a los homosexuales, pero no al contrato de unión”.
«Por lo tanto, es posible que pueda tener un ritual en el que las personas sean bendecidas por ser ellas mismas comprometidas.»
Simone Campbell
Ya en el año 2003, la Oficina de Ortodoxia del Vaticano emitió un decreto similar donde reafirmaba el respeto de la iglesia hacia las personas homosexuales, pero donde señaló que esto «no puede conducirse de ninguna manera a la aprobación del comportamiento homosexual o al reconocimiento legal de las uniones homosexuales.»
Argumentó que, al reconocerlo, no solo apoyaría el “comportamiento desviado” no aprobado por Dios, sino que crearía una equivalencia con el sacramento del matrimonio, mismo que la iglesia define como una “unión indisoluble -y solamente- entre hombre y mujer”.
Con información de AP.
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