Por Obed Campos
Los periodistas tenemos la obligación de señalar lo malo, pero también de hacernos partícipes y sentirnos orgullosos de lo bueno de nuestras comunidades y de nuestra imperfecta sociedad.
Notas como esta, me hacen sentirme hinchado de orgullo: los regiomontanos hemos demostrado en estos días que nos sobra corazón del bueno, con el apoyo en especie y en donaciones de todo tipo para nuestros hermanos haitianos varados en Nuevo León.
Como digo, estas notas son las que se deben destacar en medio de tanta oscuridad, tanta inquinia y tanta violencia que son nuestro pan de cada día.
Y si bien es cierto que no está el horno para bollos, los nuevoleoneses hemos demostrado de qué estamos hechos con las toneladas de ayuda destinadas a los albergues para los migrantes como Casa Indi.
Comida, ropa y artículos de higiene personal han llegado por montones a estos sitios de refugio demostrando que nuestra humanidad es mayor a nuestra xenofobia.
¡Bravo, Monterrey! ¡Bravo, Nuevo León!
LAS BARBAS DEL VECINO
Tres años después de ser nombrado “superdelegado” en Tamaulipas por parte del gobierno de la autollamada “4T” el de Reynosa, José Ramón Gómez Leal «JR», dejará su puesto aunque caerá en blandito porque ya le preparan chamba a nivel federal.
En su lugar, aseguran, llega Rodolfo González Valderrama quien trabajó como director de Radio Televisión y Cinematografía de la Secretaría de Gobernación y jefe de la delegación Cuauhtémoc de la Ciudad de México.
La nota publicada en los periódicos de la familia De Andar en la frontera, tuvo su eco acá en Monterrey, donde se preguntan en Morena si la “superdelegada” en Nuevo León, Judith Díaz, ya pondría sus barbas a remojar. Es pregunta, diría el clásico.