Por José Jaime Ruiz
Mariana Rodríguez Cantú y Samuel Alejandro García Sepúlveda no estarán en la boleta presidencial, pero sí en las elecciones de 2024. Mariana competirá por la alcaldía de Monterrey y Samuel es ya el virtual jefe de campaña de Jorge Álvarez Máynez y, también, el mayor agente mediático y digital en contra del PRIAN nacional y local. Dos señales: el gobernador de Nuevo León destapó, junto a Mariana, a Álvarez Máynez y el cierre de Movimiento Ciudadano será en tierras regias.
Los “acuerdos” revelados la semana pasada por el presidente del PAN, Marko Cortés, fueron el bucle que cambió la campaña de Xóchitl Gálvez que, desde la guerra sucia, pretendieron contaminar la candidatura de Claudia Sheinbaum a través de la desinformación producida por LatinUs y Carlos Loret de Mola en contra de los hijos del presidente Andrés Manuel López Obrador. En una colaboración anterior (“Xóchitl, el desastre”), ya había advertido sobre las shitstorms: “El declive de Xóchitl provocará el ascenso de las campañas negras en contra de Claudia Sheinbaum, Andrés Manuel López Obrador y sus cercanos”.
Marko Cortés, al revelar los expedientes secretos X, le dio la razón al gobernador de Nuevo León y el método de chantaje utilizado por el PRIAN nacional y regionalmente, es decir, en Coahuila y Nuevo León. Al retomar en un video en sus redes sociales la extorsión realizada por los capos locales, Francisco Cienfuegos, Zeferino Salgado y Adrián de la Garza, el gobernador García Sepúlveda también mostró el protagonismo que tendrá en estos meses electorales.
El primer video de Samuel Alejandro destaca: “Vamos a desenmascarar a la vieja política y le hemos llamado a esta serie Fuera la Vieja Política… Ya estamos a meses de que la sociedad les ponga una lección y saquemos a la vieja política de una vez por todas… Haz de cuenta que Alito y Markito, acá en Nuevo León son Paco y Chefo”.
Después de renunciar a ser el candidato de MC a la Presidencia de la República, García Sepúlveda desveló la extorsión del PRIAN de Nuevo León, donde le pedían 2 mil 500 millones de pesos para robárselos, anuencias de permisos de venta de alcohol no sujetos a revisión por el Gobierno del Estado, no pagar impuestos por cinco años, inejercicio de la acción penal en denuncias por corrupción, entre otros chantajes.
El bucle abierto por Marko Cortés no sólo ralentizó la campaña de Xóchitl Gálvez, también, desde esa implosión, la dinamitó. La anomalía calificada como pendejez cerró toda credibilidad de la candidata del PAN y del PRI. El control de daños sólo ha servido para desnudar esa alianza perversa donde lo menos que importa es el bien común de la sociedad mexicana: Xóchitl no es una candidata ciudadana, su candidatura nace de una negociación cupular a través del dedazo y de expulsar de la contienda interna a su real competidora, Beatriz Paredes. Xóchitl es producto de un dedazo, de una negociación de las élites.
El control de daños es funesto. Tan ridículo que ahora Claudio X. González y sus seguidores convierten al payaso Brozo en su ideólogo de cabecera y reproducen ad infinitum un video procaz y falaz. Recomienda Claudio: “El mensaje más importante que escucharán este año”. Al contrario, el mensaje más importante de este año es el de Marko Cortés, quien confunde la desfachatez con transparencia, que le vino a dar un puntapié innecesario, desde el conservadurismo, al desastre de la campaña electoral del PRIAN y a su mentirosa candidata, Xóchitl Gálvez –el acuerdo mafioso fue signado por su coordinador de campaña, Armando Tejeda Cid.
La encomienda de Samuel Alejandro García Sepúlveda, para la gobernabilidad de Nuevo León y para la oxigenación del país, es ser ese agente provocador que extinga en las próximas elecciones al PRI y al PAN, esos partidos del antiguo régimen.