Por Obed Campos
Ahora sí que enseñó la oreja bien gacho Jorge Zepeda Patterson, quien en su último artículo, publicado primero en El País y luego en Milenio, compara con Jesucristo a Andrés Manuel López Obrador.
Sinaloense por nacimiento, pero jalisciense por adopción, hasta donde se sabe, Zepeda Patterson es parte de una caravana de plañideras periodísticas que adoran y literalmente le lavan los pies al Mesías de La Macuspana.
“Si no hubiera un AMLO habría que haberlo inventado…” suscribe el otrora director de Milenio Guadalajara.
Y aunque se afana en “guardar proporciones”, señala que, AMLO, como Jesús, quien “no habría sido el mejor constructor de su vasta Iglesia…” pregunta quiénes serán sus “San Pedros” y con qué se toparán cuando puedan comenzar a operar.
“No formo parte de los que creen que el sexenio de López Obrador ha dañado al país, ni mucho menos”, al menos aclara Zepeda Patterson.
Leer el artículo de marras me recordó mucho las películas de Tim Burton, especialmente The Nightmare Before Christmas, que acá en el Tercer Mundo bautizaron como El Extraño Mundo de Jack, con ese humor ácido que es cómico por trágico… Porque la historia de López está llena también de muertos revividos, brujas y duendes.
Y al comparar al tabasqueño con el de Galilea, es la muestra que, santificado sea su nombre, López Obrador ya tiene pontífice.
Nada más se le olvidó un detalle: el hijo del carpintero fue torturado y crucificado.
DE LA GIRA DE SAMUEL, SÓLO UNA PREGUNTA
¿Qué hay más romántico para una pareja de jóvenes recién casados que un viaje por Europa que termine en Roma?