Por José Jaime Ruiz.
Desde una mesa repleta cualquiera decide aplaudir/ la caravana en harapos de todos los pobres… // Silvio Rodríguez.
Desde la riqueza burocrática se mide la pobreza mexicana. Si el presupuesto entre el gasto burocrático y el de investigación estuviera bien repartido, me corrijo, estuviera bien ejercido, poco pasaría, pero para la integración del Coneval la clase dorada se impone sobre el análisis de la raza de bronce. Convengamos en lo primero: desde su altura burocrática el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social discrimina a los pobres. Desde sus múltiples bienes materiales que les dio la burocracia, los “conevales” midieron la privación, la desigualdad.
Jorge Castañeda, en un artículo en El Financiero, apunta: “La destitución del anterior director del Coneval dio pretexto a Andrés Manuel López Obrador para lanzar una discusión sobre –y proseguir con su cruzada contra– los entes autónomos en México”.
Si la autonomía es dispendio, deja de ser autonomía, es prolongación de privilegios. Primero las rentas y luego las investigaciones. El Coneval pudo servir no sólo estadísticamente, sino para revisar, casi en el sentido orwelliano, no sólo cifras, sino “descifrar” a la población y, por tanto, tener políticas públicas de sometimiento. Sometimiento político y electoral.
Andrés Manuel lo hace de otra manera, en la cual profundizaré después, cuando aumenta en los estados donde existen elecciones hasta el 80 por ciento en inversión social, de “bienestar”, y eso le reditúa electoralmente, al menos, el 35 por ciento de votos. Obvio que ir contra el Coneval, como estaba estructurado, es una decisión política.
López Obrador tiene los pelos del Coneval en la mano: se corrompió. Su función básica fue desplazada por sus privilegios burocráticos. Aunque se resista, el INEGI puede integrarlo. Creo que la pregunta en una mañanera sobre el tema fue inducida: sólo hay que ver la primera fila de los preguntadores para entenderlo. Reporteros de quién sabe qué medio que se convierten en periodistas militantes y le preguntan a Andrés Manuel a modo… para que se extienda en su discurso aburrido de siempre.
Miren el informe que me dieron del Coneval, resumió el presidente en un tuit de una irresponsabilidad republicana, ¿quién se lo dio?
El tuit irresponsable –sin rigor presidencial– de López Obrador enterró al antiguo Coneval. Y, sin embargo, se lo merecía. ¿Cuándo los “conevales” evaluaron su riqueza?
@ruizjosejaime