Con más de 600 unidades fuera de servicio y otras mil 200 que saldrán de circulación por exceder su vida útil, la Asociación del Transporte Público de Pasajeros de Nuevo León advirtió de un caos en este regreso a clases debido a la falta de camiones.
Alrededor de 30 transportistas acudieron a Palacio de Gobierno en busca de una respuesta del gobernador Jaime Rodríguez Calderón, al referir que la situación se ha vuelto insostenible.
Hernán Martínez Garza, del grupo Tuesa, dijo que la flotilla es mínima en comparación de la demanda, por lo que urge un aumento a las tarifas o el subsidio para la adquisición de más unidades. Actualmente operan alrededor de 4 mil 400 camiones, con 3.5 millones de viajes al día.
“Ya no es posible, no nos da para más; tenemos una demanda creciente y el lunes empiezan las clases… Auguro que va a haber mucho problema la semana que entra. Ahorita la problemática es muy alta, hay mucho equipo parado en los talleres… Hay muchos problemas de servicio y la semana que entra se van a multiplicar porque hay una mayor demanda de servicio que lo que nosotros somos capaces de ofrecer, tenemos la misma flota de hace cinco años. Lo que le pedimos al señor Gobernador es que resuelva cuanto antes”.
Día a día, resaltó, se ven camiones a reventar, paradas muy llenas y usuarios esperando por mucho tiempo. Si bien este lunes 26 de agosto sacará todo el equipo disponible, no será suficiente, insistió.
“Nos faltan camiones, falta flota en Monterrey, desde hace muchos años se los estamos gritando. Hay mucha unidad descompuesta, y no hay dinero para sacarlas”.
Al respecto Abelardo Martínez García, del grupo Martínez García, aclaró más que un aumento es una actualización tarifaria, pues la actual está vigente desde diciembre de 2015. Lo anterior pese a que el combustible, los salarios y la inflación se mantienen al alza.
Recordó que desde el año anterior el Gobernador Rodríguez les prometió conseguir un subsidio en el IEPS, precio especial de diésel de frontera, crédito blando en Nacional Financiera, e incluso excepción del Impuesto Sobre Nómina, pero nada se concretó.
“Convenimos en que le diéramos el voto de confianza para buscar una alternativa, pero no consiguió nada. Nadie está viendo con seriedad el reto de mover a la ciudad con la demanda creciente que se integra en escuelas y en la economía formal”.
Se mostró en desacuerdo en que el Estado subsidie al Metro, que mueve apenas 180 mil personas diarias, cuando el transporte urbano moviliza 3.5 millones de pasajeros sin que se les apoye con nada.
“Existe pérdida mes con mes, día con día, todos los camiones se están apagando, no es posible continuar así. Creyendo que se le hace un bien a la sociedad, se le hace un gran daño”, agregó Eduardo García Alanís, del grupo Lobo Genius.