La Ciudad de México esconde millones de secretos y tesoros debajo de las construcciones que podemos ver a simple vista en el centro y las zonas aledañas; como sabes, durante la conquista, una cantidad desconocida de centros ceremoniales y viviendas fueron derruidos o cubiertos por otros que obedecieran a la cultura, las creencias y las costumbres de los españoles.
Uno de esos misterios fue recientemente descubierto por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) a través de la Dirección de Salvamento Arqueológico (DSA) encabezada por Victor Esperón Calleja. Se trata de un temazcal prehispánico que dan del siglo XIV, ubicado en la calle de Talavera, en el Centro Histórico.
De acuerdo con la información difundida hasta el momento, el hallazgo del temazcal indicaría la ubicación precisa de dónde se situó Temazcatitlan, un pueblo que tenía sólo deidades femeninas como Tlazolteotl, Ayopechtli, Coatlicue, Toci, Chalchiuhtlicue y Mayahuel, entre otras.
La mayor importancia histórica de este descubrimiento radica en que Temazcatitlan habría sido la sede del islote en el que se produjo el avistamiento de las señales pronosticadas por Huitzilopochtli para que el pueblo mexica se estableciera y fundaran su ciudad capital, lo que hoy conocemos como Tenochtitlan.
Esperón Calleja detalló que el temazcal mide aproximadamente cinco metros de largo y casi tres de ancho, y que fue elaborado con bloques de adobe y fragmentos de tezontle recubiertos de estuco.
Las excavaciones en el predio también revelaron los vestigios de una vivienda que fue habitada, posiblemente, por una familia indígena de origen noble, poco tiempo después de haberse consumado la conquista española.
La fecha exacta y la forma es que se dio el descubrimiento no fue revelada, pero el INAH especificó a través de un comunicado que, tras realizar los registros gráficos y fotográficos de los restos arqueológicos, la Dirección de Salvamento Arqueológico concluyó la liberación del predio ubicado en La Merced.
Fotografía: INAH