Por José Jaime Ruiz
@ruizjosejaime
–¿A qué nos aferramos Sam?
–A que hay algo bueno en este mundo y vale la pena pelear por ello.
// Sam y Frodo en la película “El señor de los anillos”
–¡Mi tesssoroooroo!
// Gollum en la película “El señor de los anillos”
“Como anillo al dedo” es la más reciente campaña orquestada por la derecha mexicana y sus voceros, aunque no será la última, ya prepararon la “demencia” del presidente Andrés Manuel López Obrador, también que gobierna como un tirano y, por tanto, habría que destituirlo. La ruta de las campañas es muy simple: fakenews y posverdades (“anillo al dedo”) que convierten en shitstorm a través de las redes sociales.
Andrés Manuel no ha dado el salto cualitativo de la comunicación política a la comunicación social. Ese ha sido su gran error en sus líneas discursivas. Anclado en sus extensos años como opositor, no ha entendido movimientos sociales como el feminismo que, a través del tema de los feminicidios (Fátima), lo rebasó. Lo escribí en su momento: La 4T será feminista o no será. Tampoco entendió el inicio de la Fase Uno de la pandemia del coronavirus y su discurso chocó con el discurso global.
Las facturas se cobran y la sociedad le cobró su insensibilidad. Necio, quiso imponer agenda setting con el avión presidencial, sólo consiguió un aterrizaje forzoso, si es que no un estrellamiento. Los voceros de la derecha aprovecharon muy bien los deslices comunicacionales de López Obrador en temas como los medicamentos para los niños con cáncer, población con VIH, feminicidios, coronavirus. La derecha se asumió, en cierto grado pero hipócritamente, como defensora del feminismo y de la comunidad LGTB (y siglas que la acompañan). El gobierno de izquierda de la 4T se vio como un gobierno conservador.
Todos estos temas fueron aprovechados por el periodismo tóxico, los zopilotes, la comunidad Gollum –para seguir con el tema de los anillos–, comunidad degradada que pasó con más pena que gloria del chayote gubernamental al chayote de los empresarios de la derecha (¿hay otro tipo de empresarios?, sí, chingo). El corifeo empresarial dicta la mentira, la desmesura, y el coro de zopilotes y zopilotas acata y distribuye su vómito biliar, su amarillismo.
Los voceros, los intelectuales orgánicos de la derecha son muy fáciles de ubicar: todos los días publican o tuitean mensajes en contra de López Obrador. Como el Gollum en El señor de los anillos, los corroe la ambición y se van desgastando inexorablemente. Han perdido credibilidad, prestigio, crédito académico. Frente a la Cuarta Transformación inducen su cuarta degradación, su ruido es regurgitante e invocan su miseria intelectual: ¡My precious! ¡My precious! ¡My precious!
