Las autoridades sanitarias de México informaron este lunes que el país ya suma 125 muertes y 2,439 contagiados por coronavirus a nivel nacional.
Del total de casos confirmados, el 58% son hombres y el 42% son mujeres. Los mayores de 65 años ya representan más de 300 casos y son el sector más afectado en este sentido. La mediana de edad, por su parte, es de 44 años, ya que los casos van desde menores de un año a los 95 años.
Entre los contagiados, el 74% no ha requerido hospitalización, pero el 26% sí: de ellos, el 9% se encuentra estable, es decir, 221 personas. Los casos graves representan el 13.53% (330 casos) y los intubados son 89 individuos, es decir, el 3.65 por ciento.
La Ciudad de México es la que más casos positivos presenta en toda la República, con 609 casos. Le sigue el Estado de México, con 261 pacientes, y Puebla, con 156, que ya superó a Jalisco, una entidad que consistentemente se encontraba entre los sitios con más personas contagiadas.
Entre las fatalidades, tres cuartas partes son hombres (75%) y uno de cada cuatro fallecimientos son mujeres (25%).
Este lunes también se cumplió una semana del decreto de emergencia sanitaria por causas de fuerza mayor que emitió el gobierno de Andrés Manuel López Obrador. En su momento, también, se extendió la Jornada Nacional de Sana Distancia hasta el 29 de abril.
Las actividades no esenciales, incluidas las del gobierno federal, se encuentran suspendidas hasta esa fecha. Todas las escuelas de todos los niveles en el país, y una parte de los empleos del sector privado que pueden laborar a distancia, han suspendido también el trabajo presencial.
Y es que México se prepara para ingresar en la fase 3 de la epidemia de COVID-19, la cual ocurrirá en las próximas semanas, donde se espera que el aumento del contagio local y las muertes se recrudezcan, como es natural durante una pandemia.
Por ello, este domingo, en el marco de su informe de gobierno trimestral, López Obrador anunció un plan para la reactivación económica del país que dejó inconforme sobre todo al sector privado.
En su estrategia, el mandatario mexicano adelantó que aplicará con más rigor la austeridad republicana en su gobierno y por lo tanto bajará los sueldos de los altos funcionarios públicos y se eliminarán los aguinaldos desde el cargo de subdirectores hasta el del mismo presidente.
El mandatario especificó una serie de medidas para llevar a cabo la que llamó «reactivación económica» del país. El tabasqueño las resumió como la suma de tres elementos básicos: «mayor inversión pública para el desarrollo, empleo pleno y honestidad y austeridad republicana», incluidos una serie de créditos a micro empresas y al sector más