El partido Movimiento de Regeneración Nacional se vio obligado a suspender el fin de semana pasado varias de sus asambleas distritales que forman parte de la renovación de su dirigencia. De las 122 asambleas programadas, en una veintena se registraron incidentes, conatos de bronca e incluso violencia armada, lo que impidió que se pudiera elegir a los participantes al Congreso Nacional del partido, en el que se votará por un nuevo o nueva dirigente nacional.
De acuerdo con el diario La Jornada, los estados de la República donde se reportan más incidentes son Coahuila, Guanajuato, San Luis Potosí y Zacatecas.
Sin embargo, el caso más sonado es el de Jalisco, donde grupos armados irrumpieron en nueve de las asambleas programadas, abriendo fuego en muchos de los casos y dejando un salto de cuatro personas heridas.
Proporción de irregularidades es “aceptable”: Morena
Luego del agitado fin de semana, la dirigencia nacional de Morena minimizó las suspensiones para destacar que la mayoría de las asambleas distritales se llevaron a cabo con normalidad.
El presidente de la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia del instituto político, Héctor Díaz-Polanco, lamentó la violencia armada registrada en Jalisco, pero consideró que todas las demás incidencias se encuentran dentro de sus parámetros.
Esto, pese a que algunas de las irregularidades incluyen la violencia verbal e incluso física entre grupos antagónicos, impugnaciones al padrón electoral, robos de urna y acusaciones por fraude en las elecciones para definir a los delegados a la Asamblea Nacional: “Una cosa es que en cada lugar pueda haber uno o dos casos de situaciones conflictivas, y otra que eso implique algún desastre, porque eso es normal”.
Díaz-Polanco resaltó que se realizaron unas 60 asambleas por día entre el 12 y 13 de octubre y “si tenemos problemas en 10 o 15, es una proporción más o menos aceptable para nosotros”.
Fotografía: Adolfo Valtierra / Cuartoscuro
